lunes, 28 de mayo de 2012

Negro y rojo, de chinches y cigarras

Hace unos días comenté unas cuantas cosillas de varias especies de chinches que pueden verse estos días por las zonas bajas de Salas y Tineo. Pero la primavera no para, es uno de los mejores momentos del año para observar insectos, ya que la floración está en su apogeo y muchos pequeños invertebrados aprovechan este momento del año para pasar por su fase adulta. Así, en la ribera del Narcea me topé esta semana con una de las chinches más llamativas que tenemos en nuestra fauna, la llamada chinche rayada Graphiosoma lineatum.


Esta chinche presenta una coloración "aposemática", a bandas negras y rojas para advertir a los depredadores de su mal sabor. Se alimenta de jugos vegetales, incluso del néctar de flores como se aprecia en la fotografía. En ocasiones también se denomina chinche italiana, pero la subs. italica está solo admitida a nivel de subespecie. En su parte inferior también presenta una llamativa combinación de tonos rojos y negros.


Parientes de las chinches y también de las cigarras, y muy similares a estos en la forma del cuerpo, son los cercópidos. Los representantes del género Cercopis presentan una coloración negra en general, con manchas rojas o anaranjadas repartidas a lo largo del cuerpo.


La especie más abundante en Asturias es la de la foto, Cercopis intermedia, que se caracteriza por tener las rodillas de color anaranjado. A estos insectos se les llama también cigarra espumadera, porque las larvas, para protegerse, chupa la savia de la planta y con la ayuda de una proteína produce una espuma parecida a la saliva humana con la que se envuelve.



jueves, 24 de mayo de 2012

Llegan las Vanessas

Una fecha que guardo siempre en mi calendario fenológico es la observación de los primeros ejemplares de la mariposa vanessa de los cardos Vanessa cardui, y este año las detecté en los montes de Salas ayer día 23 de mayo.


La popular "cardera" es una bella e inconfundible mariposa de tonos anaranjados. Sus migraciones probablemente equivalen a las de la conocida mariposa monarca que se encuentra en Norteamérica. A diferencia de otras mariposas de las que es pariente, la cardera no entra en diapausa invernal, por lo que debe pasar dicha estación en zonas cálidas, sobre todo el norte de África. Al llegar la primavera se mueve hacia el norte, llegando a desplazarse varios miles de kilómetros, muy cerca del Circulo Polar Ártico.


Junto a la cardera, estos días puede verse, mucho más frecuente, su pariente la vanessa numerada Vanessa atalanta. Esta vanesa sí hiberna en la época fría, y por eso en invierno se encuentra más al norte, de hecho en Asturias se encuentra todo el año. Sin embargo en estos días es bastante patente el aumento en su número, que nos indica al igual que en la cardera la arribada de migrantes desde zonas más al sur.


La migración de la vanesa atalanta, aunque más enmascarada por esta presencia de ejemplares en todas las épocas, es tan importante como la de la cardera, y probablemente llega más al norte. Por cierto, los ejemplares que fotografié estaban haciendo lo que se llama hilltopping. Sedimentados en las zonas altas, cuando pasaba otra mariposa, de cualquier especie, por su zona, la perseguían hasta provocar su huida. Lo curioso es que las atalantas se perseguían también entre ellas, mientras que ignoraban a la cardera que estaba con ellas.


lunes, 21 de mayo de 2012

Cicindelas

Si en mi última entrada comentaba algunas cosas de la "mosca escorpión", hoy me toca hablar del "escarabajo tigre", que así se conoce también a las cicindelas, sin duda por su marcado carácter depredador. Este año estoy apreciando por los montes de Salas y Tineo una buena abundancia de la más frecuente de todas, la cicindela campestre Cicindela campestris, siempre en lugares abiertos y despejados. Es un precioso e inconfundible insecto (como su nombre "animal" indica, del grupo de los coleópteros o escarabajos) con un brillante tono verde metálico y provisto de fuertes mandíbulas.

Cicindela campestris

Con una longitud de 12 a 15 mm, las cicindelas corren bastante rápido (para su tamaño) y son capaces de volar, aunque tramos cortos de unos pocos metros como máximo. Las larvas también son cazadoras, acechando a sus presas desde madrigueras excavadas en la tierra. Aunque hay varias especies de cicindelas, ésta es con mucho la más frecuente y común.


miércoles, 16 de mayo de 2012

Mosca escorpión

Existe una multitud de especies de insectos, muchos de ellos son especies discretas y con pocos rasgos llamativos. Algunos nos pueden atraer por su colorido, aspecto o comportamiento, y unos pocos son insectos francamente fascinantes que destacan en casi todos los aspectos. Yo creo que la mosca escorpión entra dentro de esta última categoría. Estos días he podido ver unos cuantas en Salas y Tineo, sobre todo en zonas de bosque de ribera, que pienso pertenecen a la especie Panorpa germanica.


La mosca escorpión no es un díptero, sino un mecóptero, y su nombre común alude a la similitud de una estructura que presentan los machos en forma de pinza en el postabdomen con la de los escorpiones. Esta pinza tiene el uso fundamental de sujetar a la hembra durante la reproducción, ya que el insecto es totalmente inofensivo para el hombre.

Pero al igual que se llama mosca escorpión, este insecto podría llamarse también mosca elefante, dado que presenta los órganos bucales muy modificados a modo de trompa.


Los métodos de alimentación de estos insectos son muy variados, ya que a veces son capaces de cazar pequeños insectos o arañas, o carroñear insectos muertos, o incluso robarlos de las telarañas. Su dieta puede incluir hasta néctar y pequeños pétalos de las flores.


Pero es que hasta la biología reproductiva de estas especies es peculiar. Durante el cortejo, los machos suministran bolitas de saliva a las hembras para ser aceptados, secreciones que son fundamentales para el desarrollo y maduración de los huevos. El macho proporciona estas bolitas a la hembra durante todo el tiempo que dura la cópula.

domingo, 13 de mayo de 2012

Vámonos de chinches

Las chinches me parecen insectos bastante atractivos, con formas variadas y muchas de ellas con bastante colorido, aunque también es verdad que algunas de ellas resultan bastante perjudiciales. Esto es por su foma de alimentarse, ya que poseen un aparato bucal con piezas perforantes, con el que extraen savia de las plantas, o incluso sangre de otros animales o del hombre (las que toda la vida se han llamado "chinches", aunque son muy pocas especies.

Las chinches más llamativas pertenecen al suborden de los heterópteros, cuyo nombre alude a que la mayoría de las especies tienen las alas anteriores parcialmente endurecidas, con la parte basal dura y la apical membranosa. Esto se observa bien en una de las especies más corrientes en Asturias, la llamada chinche de la fresa Dolycoris baccarum.


En esta chinche la parte oscura final es la zona membranosa de las alas. Forma parte del grupo de los pentatómidos, caracterizados en cierta manera por su escutelo triangular, al igual que otra especie también frecuente en Asturias, la chinche azul de la col Eurydema oleracea.


En esta foto se puede ver la típica forma en que realizan la cópula estos insectos. Otra familia representada en Asturias es la de los Ropálidos, cuya forma es más alargada. Muchas especies presentan una coloración muy típica en tonos aranjados y negros, semejando máscaras africanas, como es el caso de la especie Corizus hyosciami, que en algunos lugares llaman "chinche del beleño".


Como se ve hay cierta tendencia a apellidar a las chinches con apelativos de plantas. Pero en fin, no todas las chinches presentan los atractivos colores de las anteriores, por ejemplo la especie Eysarcoris venustissimus es muy discreta, tanto que cuando las fotografié pense que eran ninfas de otras especies hasta que me las identificó Constantino Escuer, un compañero de BV Virtual. Esta especie es más escasa que las anteriores.


Todas estas especies fueron fotografiadas en las riberas del Narcea, en Tineo en el mismo tramo de río que localicé la mariposa que subí el otro día, la doncella de ondas rojas.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Doncella de ondas rojas

Bajo este sugerente nombre se esconde una de nuestras mariposas más bellas y coloridas, la doncella de ondas rojas Euphydrias aurinia. Mide entre 32 y 46 mm, la hembra es más grande que el macho, y aunque es un lepidóptero algo variable en cuanto a aspecto, presenta un patrón inconfundible de bandas amarillentas, negras y anaranjadas más que rojizas, como dice su nombre. Es una especie primaveral, apareciendo a finales de abril o en mayo, y las larvas se alimentan de varias especies pero sobre todo de madreselvas. El pasado día 7 localicé el primer ejemplar en Tineo, en las riberas del Narcea.

Doncella de ondas rojas Euphydrias aurinia beckeri Marsh fritillary

Esta mariposa tiene una amplia distribución, pero en muchos países de Europa está sufriendo una regresión muy seria y de algunos de ellos ya se ha extinguido. En otros, como Gran Bretaña, todas las zonas donde se encuentra están cartografiadas y con un intenso seguimiento sobre ellas. Sin embargo en Asturias parece gozar de un buen estado de salud y se encuentra ampliamente distribuida. Este hecho puede deberse a que ocupa un hábitat diferente al de sus congéneres europeas, en el resto del continente parece una especie ligada a los pantanos (de hecho se conoce en inglés como marsh fritillary) y aquí en gran tipo de ecosistemas, desde bosques de ribera a lindes de prados, aunque siempre con cierta calidad ambiental.

La subespecie que encontramos aquí es la Euphydrias aurinia beckeri. El siguiente ejemplar es uno del año pasado en la misma zona.


lunes, 7 de mayo de 2012

Mosquitero ibérico

El mosquitero ibérico es un pajarín de tonos verdosos y amarillentos, muy parecido al mosquitero común, del que antes era conespecífico. Se separó de este hace unos cuantos años, denominándose a la especie nueva Phylloscopus brehmii; sin embargo estudios posteriores demostraron que el ejemplar en el que se había basado la descripción de la nueva especie era en realidad una hembra de mosquitero común, por eso el nombre fue invalidado y el correcto ahora es Phylloscopus ibericus. Sólo se puede distinguir con seguridad por el canto (y también los reclamos), como el caso de este ejemplar que estuve observando hoy en la ribera del Narcea.

Mosquitero ibérico Phylloscopus ibericus Iberian chiffchaff

Como a los ornitólogos les encanta complicar las cosas (en general a todos los biólogos) en un reciente estudio se ha separado en dos subespecies. La nuestra sería la subespecie biscayensis, que ocuparía la mitad norte de la Península Ibérica, la otra, la nominal, ocupa la mitad sur y el norte de África. Se diferencian por detalles mínimos del plumaje. Todos los mosquiteros ibéricos migran a África y vuelven en primavera a criar.


Además de por el canto, hay otros rasgos que pueden ayudar a identificar al mosquitero ibérico, en estas fotos se ve bien una de ellas como es la garganta de tonos muy amarillentos. En Asturias no es escaso, y en Tineo y Salas se distribuye sobre todo por los bosques de ribera y zonas de vegetación caducifolia.



El canto de la especie, una vez que se oye, resulta inconfundible, aquí pongo un buen video sacado de youtube.

http://www.youtube.com/watch?v=Yc_jnyeZGXg&feature=related